sábado, 14 de febrero de 2015

LA PROFUNDIDAD DE CAMPO  EN LA FOTOGRAFÍA CREATIVA (I)
Por Manuel Vilela

El factor de la profundidad de campo es fundamental a la hora de transmitir un mensaje, expresar un sentimiento o estado de ánimo o contar una historia.  Al efectuar una captura, intentamos reflejar una realidad de tres dimensiones en un soporte de sólo dos dimensiones, lo que nos obliga a trabajar con diferentes planos focales y decidir qué elementos vamos a enfocar y cuáles desenfocar para conseguir dotar a nuestra composición de una sensación de profundidad y espacio tridimensional.

Como siempre, lo primero que haremos será seleccionar los elementos de nuestra escena, es decir, el encuadre, para a continuación decidir su disposición en la misma, es decir, la composición. Hasta aquí nada especial.  Es lo que se hace en cualquier toma.  Lo que va a añadir creatividad a nuestra composición es el grado de definición de los diferentes elementos, es decir, vamos a definir la profundidad de campo.

Especialmente tendremos que centrarnos en el fondo de nuestra imagen. Si vamos a fotografiar naturaleza muerta, deportes, naturaleza en general, retratos, etc, lo ideal sería escoger un motivo nítido en primer plano y un ligero desenfoque del fondo. En función de estos dos factores escogeremos los parámetros técnicos de nuestro equipo fotográfico: iluminación, apertura, focal, velocidad, ISO, etc.  Debemos seleccionar qué elementos de nuestro encuadre vamos a aislar del resto y si al resto lo vamos a dejar desenfocado o vamos a aplicarle algún enfoque.  A los elementos seleccionados aplicaremos un enfoque selectivo y al resto lo dejaremos sin enfocar.

¡¡¡ Cuidado con la velocidad de disparo !!!.   Para conseguir la nitidez de un motivo, a veces no es suficiente con una velocidad de disparo alta y exposición suficiente, sino que habrá que jugar también con la apertura del diafragma, es decir, con la profundidad de campo.

Para realizar una macro o una aproximación de una flor puede ser suficiente con un f8 o f10 para conservar la nitidez de todo el campo de visión de nuestro objetivo, pero con un paisaje es posible que haya que utilizar un f22 o un f32.  Ya sabemos que a mayor número f (diafragma más cerrado), menos luz pasará a través de nuestro objetivo. Por esta razón deberíamos emplear objetivos muy luminosos en estas tomas.  Por último, es muy aconsejable usar un trípode siempre que sea posible.  ¿Porqué?  Porque va a permitirnos disparar sobre motivos estáticos con una velocidad muy baja manteniendo la luminosidad o con un diafragma muy cerrado, sin perder luminosidad y sin necesidad de aumentar la ISO hasta extremos indeseados, además de mejorar la estabilidad del equipo y evitar trepidaciones, como es obvio.

Con esto conseguiremos dos objetivos: uno, tridimensionalidad, dando realismo a la escena y dos, fijar la atención del espectador en los elementos fundamentales, lo que favorecerá la comprensión de nuestra historia.



I       IMÁGENES ESTÁTICAS

Sin elementos en movimiento es más fácil realizar una buena composición de la escena. En este caso es más importante centrarse en el enfoque, profundidad de campo y exposición más que en la velocidad de disparo, que debería pasar a un segundo plano de decisiones.

Si disponemos de un trípode, ajustaremos los puntos de enfoque sobre los motivos principales e iremos cerrando el diafragma hasta conseguir enfocar los objetos del fondo. Si vamos a desenfocar completamente el fondo, dejaremos el diafragma abierto y ajustaremos el exposímetro variando la velocidad de disparo hasta conseguir una exposición a nuestro gusto. En caso necesario aumentaremos el valor ISO. Sin embargo, una veces nos interesará subexponer la imagen (por ejemplo, para conseguir un efecto de intimidad en un retrato) y otra será todo lo contrario (por ejemplo, para conseguir un efecto impactante en un contraluz o en un skyline), sin olvidar que siempre es más fácil corregir una subexposición que lo contrario.

Si no disponemos de un trípode no nos queda más alternativa que buscar un punto de apoyo donde sea posible, y si no fuera posible, debemos estabilizar nuestro cuerpo como creamos más oportuno, abrir las piernas, sentarnos, arrodillarnos, hacer las tomas a primera hora del día, apoyarnos en el hombro de otra persona, etc. cualquier truco o recurso que nos permita bajar la velocidad de disparo sin riesgo de arruinar nuestra toma.

Veamos tres ejemplos:


Pareja de hecho
Esta fotografía es un clásico de naturaleza viva.


El motivo es único, las dos rosas ocupan la imagen y en ellas se fija todo el interés del espectador, constituyendo así el centro del mensaje. Al desenfocar el fondo se consigue un efecto tridimensional, y para evitar que las rosas queden “flotando”, sin ningún soporte físico, se han dejado intencionadamente enfocados o semienfocados algunos elementos como las espinas, restos de ramas y pétalos.  De esta forma se dá a la composición un halo de realismo y naturalidad.

Técnicamente es una aproximación casi simétrica con luz natural lateral sin apoyo de flash ni trípode, con un objetivo fijo de 50 mm, f/2.2, 1/500, ISO 640 y ajuste manual.

Al aplicar un diafragma muy abierto el fondo ha quedado completamente desenfocado, resaltando drásticamente las dos rosas y las gotas de lluvia recién caída.

Se pretende transmitir el estado de felicidad y amor que representan las rosas en el Día de San Valentín (día de los enamorados), con algunas espinas que sin duda surgen en el camino de toda relación de pareja. Las gotas de agua pretenden reflejar la frescura y vitalidad que debe tener esa relación.



Fuente de Neptuno
Esta fotografía es un paisaje de arquitectura urbana.

Técnicamente es un plano medio, contrapicado, con luz vespertina natural cenital sobre el fondo con el motivo en zona de sombra, sin apoyo de flash, con un objetivo fijo de 50 mm, f/9, 1/160, ISO 100 y ajuste manual.

En este caso se ha empleado una apertura de diafragma media, por lo que el fondo ha quedado completamente enfocado para que se aprecie el entorno del motivo central.

La toma se ha realizado con luz suficiente, por lo que se ha programado una ISO 100 sin apoyo de flash ni trípode. Se ha dejado intencionadamente subexpuesta para darle un toque de intimidad acorde con la puesta de sol que se intuye de la luz ambiente. Tan sólo, por precaución, se ha aplicado una velocidad de disparo mediana para congelar con claridad los chorros de agua y amortiguar los posibles desenfoques causados por el movimiento de las plantas causado por la brisa. El contrapicado y la composición vertical siguiendo la regla de los tercios contribuyen al dramatismo y grandiosidad de la escena, dado que el motivo central de la composición, la efigie del dios Neptuno, es en realidad relativamente pequeña comparada con el resto de elementos.  De haberse centrado en el lienzo habría quedado muy minimizada.






Rosas del Jardín Inglés
Esta fotografía es un paisaje urbano de naturaleza.

Técnicamente es un plano de detalle con luz de mediodía por un lado y por el otro con apoyo de flash y reflector a 45º, objetivo zoom de 40 mm, f/16, 1/15, ISO 100, ajuste manual y trípode.  El enfoque ha sido automático de 9 puntos, con ajuste fino manual.

En este caso se ha aplicado un diafragma cerrado para conseguir tres planos de enfoque distintos, el primer plano de detalle enfocado, el segundo plano de entorno semidesenfocado y el fondo muy desenfocado, pero apreciando algunos detalles. Esto se ha conseguido gracias al ajuste fino del anillo de enfoque del objetivo zoom. La toma se ha realizado con luz natural suficiente, sin embargo se ha utilizado el flash de rebote para compensar la fuerte zona de sombra opuesta a la luz solar, usando un reflector de mano color blanco para no sobreexponer.  Se ha aprovechado el momento en el que la brisa era de menor intensidad para disparar a la menor velocidad posible con ayuda del trípode y un disparador manual. La toma está contrapicada para ampliar el campo vertical del fondo y la composición sigue la regla de los tercios.


Se pretende transmitir una sensación de paz y tranquilidad propias de un jardín solitario, a la vez que cierto dinamismo y originalidad gracias a la diagonalidad del motivo central.

No hay comentarios:

Publicar un comentario